El Principio del Mentalismo. Este principio nos dice: “El pensamiento son cosas y lo que piensas se manifiesta”.
Lo primero que tenemos que saber es que tú mismo te estás saboteando en tus creaciones. Porque entre el 95% y el 98% de los 60.000 pensamientos que tenemos al día, están albergados en tu mente subconsciente. Lo que significa que estás recurriendo una y otra vez a tus pensamientos inconscientes almacenados en tu mente subconsciente. Que es donde moran todas tus creencias, que es tu paradigma o manera de percibir el mundo.
El programa inconsciente se creó hace muchos años. Tu mente es un mecanismo de supervivencia creado para protegerte. Toda esta información se plasma en tu ADN y se nos va transmitiendo de generación en generación.
Los físicos cuánticos nos dicen que el universo se comporta como un holograma. Nosotros estamos proyectando lo que nosotros creamos de la realidad. Y no sólo lo que tú proyectas sino todas las personas que configuramos la humanidad.
La materia se deriva de la mente, y no la mente de la materia. Tú tienes 100.000 millones de neuronas y cada una de ellas innumerables extensiones. La combinación de todas ellas hace tu mente, que es un tipo de paradigma que crea tu realidad. Tú eliges mediante tu atención (consciente o inconsciente) cuál será esa combinación y cuál será tu vida.
La energía y la materia son dos formas de una misma cosa, por la fórmula de Einstein de E=MC²:
- La materia es energía concentrada.
- La energía es materia libre.
Por la ciencia sabemos que la materia se compone de moléculas, las moléculas de átomos, los átomos de quarks, y los quarks de energía de consciencia. Y la consciencia es la parte visible que se crea por debajo de la supraconsciencia y la subconsciencia. La supraconsciencia está por debajo de los quarks.
Cuando tú fijas una realidad en la subconsciencia, comienzan los mecanismos de atracción creando los sistemas como quarks, átomos, moléculas, etc., que se atraen por vibración y conforman lo que percibimos como materia. Todo empieza por una selección de la realidad. Esta selección previa inicia el mecanismo de creación de materia por estos mecanismos.
SOMOS SERES CREADORES QUE HACEMOS CONSCIENTE EL INCONSCIENTE Y LO PERCIBIMOS A TRAVÉS DE LOS SENTIDOS.
Somos seres creadores y los verdaderos límites están en nuestra propia creencia, no podemos crear grandes cosas porque no las creemos posibles. Nuestra Alma o Conciencia nos recuerda que nuestro único límite es creer.
LO QUE CREES, CREAS.
Cuando tú das un paso más y además de creer, sabes esta verdad; y sobre todo, haces que tu mente sea un auténtico rayo láser donde todos tus pensamientos se enfocan solo a una dirección; sí, ni uno solo en otra dirección que no fuera la de tu propósito, harías milagros. Un milagro es solo algo no común, nada más. Es algo en lo que las masas no creen, por eso es tan raro de ver.
Como dijo William James, psicólogo norteamericano, padre de la psicología: “EL PODER DE MOVER EL MUNDO ESTÁ EN LA MENTE SUBCONSCIENTE”. Lo que sea que imprimas en tu mente subconsciente, esta removerá cielo y tierra para que se cumpla.
Sabías que el principio de ABRACADABRA significa: “QUE SE HAGA LO QUE HE DICHO”. El universo se compone de TODO, tú, con tus pensamientos y palabras haces que una parte de ese TODO se manifieste, se haga visible. Por esto, nombra lo que quieres como si ya fuese y como un auténtico rayo láser, no dudes, mantente firme, y luego di: “Que se haga lo que he dicho”.
Si una idea ocupa tu mente de manera exclusiva, esa tiene que manifestarse en tu realidad física. No podría manifestarse, sino que tiene que hacerlo. Son principios, es una ley, y no falla jamás.
La FE verdadera te impulsa a la acción, es creer que algo es posible, y por eso haces que pase.
Y entonces, si todo es energía, tal como nos dice la fórmula de Einstein de E=MC² y esa energía también es la materia. Toda la materia está compuesta de átomos de los cuales nacen los elementos.
Como sabemos, hay 118 elementos y se diferencian porque tienen diferentes números de protones, neutrones y electrones. Es la triada de la que está compuesto un átomo.
Estos 118 elementos se diferencian por el número de protones que tienen en su núcleo. El núcleo de un átomo está compuesto de protones y neutrones, y los electrones están fuera, girando como en una nube de posibilidades.
Si miras una Tabla Periódica de los Elementos Químicos, verás que hay 118 elementos y cada uno con un número en su interior. Este número es el NÚMERO ATÓMICO que te indica el número de protones en el núcleo.
El Número Atómico es el que dota al elemento de la forma que lo distingue. Por ejemplo, el hidrógeno es el número 1, lo que indica que en su núcleo hay 1 protón. Si un átomo tiene un protón se trata de un átomo de hidrógeno. Si tiene 3, entonces ya no es hidrógeno, sería litio. A nivel atómico, un par de protones cambia el elemento.
Toda la materia está hecha de la combinación de elementos, está combinación crea las moléculas y la combinación de moléculas produce materia. La combinación de posibilidades es infinita.
El AGUA es la combinación de dos elementos: el hidrógeno y el oxígeno. Por tanto, el agua no es un elemento, sino una molécula, porque se compone de 1 oxígeno y 2 de hidrógeno.
Y como hemos dicho, un átomo de oxígeno y uno de hidrógeno se diferencian en su número atómico; es decir, el hidrógeno tiene un número atómico de 1, tiene un protón en el núcleo, y el oxígeno tiene un número de 8, es decir, tiene 8 protones en el núcleo.
Toda la materia está compuesta de esta triada, lo único que cambia es el número de la triada: de protones, neutrones y electrones. Todo es una combinación de elementos que da lugar a la materia.
EFECTO OBSERVADOR.
Gracias al descubrimiento de este efecto, sabemos que los pensamientos son cosas y que lo que piensas se manifiesta. Es la calidad de tus pensamientos lo que ordena la materia de tu vida de una forma u otra. Igual que si combinas de una manera sacas agua y si combinas de otra, sacas carbono; así mismo, si combinas de una manera sacas pobreza y si combinas de otra, sacas riqueza, o desamor y amor, o enfermedad y salud.
Es tu pensamiento (inconsciente, tus creencias) lo que determina el protón, el número atómico. Y una vez que has fijado el número de protones, el número de neutrones es el mismo y en el exterior el número de electrones; y ya tienes el átomo.
Y al juntarse este átomo con otros forman una molécula, esa con otras forman la materia. Por la LEY DE LA ATRACCIÓN sabemos que vibraciones similares vibran juntas. Tú atraes lo que eres, tus pensamientos, y tus pensamientos crean una materia, juntando átomos entre sí por vibración similar.
Entonces, si tus pensamientos crean esos átomos por la observación, fíjate de la importancia de tener claridad de pensamiento; ahora sabes por qué hay tanta gente con vidas caóticas. Dicen una cosa, piensan otra y hacen otra totalmente distinta.
De ahí la importancia de la precisión a la hora de seleccionar tus pensamientos en la 5ª dimensión donde existe una combinación de elementos infinita y de ahí derivan nuestros resultados, toda la materia.
Tú, con tu pensamiento, eliges una variable de la 5ª dimensión, la Supraconsciencia, y se crea un molde en la 4ª dimensión, la Subconsciencia, y eso se manifiesta en la 3ª dimensión, la Consciencia. Tu vida es un caos porque no eliges conscientemente y entonces manifiestas miles de variables inconscientes.
PRECISIÓN DEL PENSAMIENTO.
Tener una intención clara a la hora de seleccionar una variable de la 5ª dimensión es “supe importante”.
Si miras la tabla periódica de los elementos y buscas el oro, verás que su número atómico es 79. Esto significa que el oro tiene 79 protones en el núcleo y 79 neutrones y que en el exterior tiene una nube de 79 electrones. El precio de la onza de oro se valora en unos 2.000€.
Y si miras el plomo tiene un número atómico de 82. El precio de la onza de plomo es de 0,80€ y el del oro de 2.000€, y su única diferencia a nivel atómico son 3 protones en el núcleo.
Tú vida es así también. Una desviación en la precisión de tu intención y de tus pensamientos y tu vida pasará de abundante a pobre, de amor a desamor y de sano a enfermo. Y si te enfocas con una intención clara y precisa, y subes la vibración y la calidad de tus pensamientos, tu vida pasará de pobre a abundante, de desamor a amor y de enfermo a sano.
PRINCIPIO DE CAUSA Y EFECTO.
Según este principio la causa son los pensamientos, y a nivel atómico (como hemos visto), lo pequeño marca una gran diferencia. Si quieres que tu vida cambie a mejor, tienes que decidir algo con absoluta precisión, tener una intención muy clara, y no moverte de ahí en todo el proceso que pueda durar (días o años), con constancia y fe.
Como ves, la diferencia entre el éxito y el fracaso es insignificante, pequeñísima, casi no se ve. Los pensamientos son cosas que no se ven, pero crean todo lo que se ve.
La gente copia las estrategias de los ricos para tener éxito en sus negocios, en lugar de aprender la forma de pensar de ellos.
Einstein dijo que «la energía se convierte en materia, y esta energía la diriges tú con tus pensamientos». Los pensamientos son cosas, lo que piensas se manifiesta. También dijo: que «los grandes espíritus siempre han encontrado una violenta oposición por parte de las mentes mediocres».
Algunos científicos escépticos no entienden que la realidad afectada por la observación depende de un sinfín de pensamientos inconsciente depositados en nuestra mente subconsciente, creando un sinfín de posibilidades infinitas, por lo que es imposible predecir un resultado de la observación.
Gracias a los científicos del siglo pasado Bohr y Heisenberg, que descubrieron otro universo que no tiene nada que ver con el clásico sistema solar en miniatura con el que se describía a los átomos. Los átomos se comportan de forma mucho más caótica, como una auténtica nube de probabilidades infinitas.
Por lo que los físicos llaman la SUPERPOSICIÓN CUÁNTICA que es la suma de todas las potencialidades; cada partícula atómica no es algo estable y predecible, sino que existe como una potencialidad de cualquier posibilidad futura.
Esto no lleva a afirmar que tú y lo que deseas estáis hechos de átomos y estos, a su vez están hechos de potenciales infinitos que tú creas con tú pensamiento. La suma de tus pensamientos y los de quienes te rodean, es la superposición cuántica, y esa es la cocreación que obtendrás en el futuro.