La relajación muscular progresiva es una técnica de tratamiento del control de la activación desarrollada por el médico estadounidense Edmund Jacobson en los primeros años del siglo XX.  Técnica que disminuye la ansiedad y el estrés.

Científicamente se ha comprobado que cuando una persona tiene ansiedad, en su sangre se encuentran grandes cantidades de la hormona llamada Lactato y tras la realización de esta relajación sus niveles de Lactato han disminuido considerablemente. Prueba evidente que su ansiedad ha disminuido tras la relajación. Ya que la tensión muscular acompaña a la ansiedad, uno puede reducir la ansiedad aprendiendo a relajar la tensión muscular.

Es necesario entrenar a los pacientes para relajar voluntariamente ciertos músculos de su cuerpo para reducir los síntomas de la ansiedad. La relajación es un método de autocontrol que requiere un proceso de aprendizaje. Concentrarse para realizar correctamente los ejercicios, y en disfrutar de las sensaciones que voy a ir haciendo aparecer en el cuerpo.

PASOS PARA UNA BUENA REALIZACIÓN DE LA TÉCNICA

  1. Lo ideal es hacerla sentado en una silla cómoda y que tuviera reposa brazos. Si lo prefieres puedes hacerlo tumbado.
  2. Procura no cruzar las piernas ni los brazos.
  3. Ponte ropa que no te apriete y quítate los zapatos.
  4. Las respiraciones hazlas lenta y profundamente.
  5. Mantén los ojos cerrados suavemente.
  6. Pon tu atención, sobre todo, en la sensación de los músculos, en el contraste entre la tensión y la relajación.
  7. Trata de trabajar solo el grupo de músculos que estamos tensando en cada momento.

BENEFICIOS DE LA RELAJACIÓN MUSCULAR PROGRESIVA

  • Reducir el nivel de ansiedad (actividad fisiológica) y controlar los síntomas.
  • Disminuir la tensión muscular acumulada.
  • Mejorar enfermedades y problemas relacionados con la salud.
  • Aumentar el conocimiento del propio estado fisiológico (del nivel de activación).
  • Evitar reacciones excesivas ante situaciones estresantes.
  • Manejar situaciones novedosas.

PROBLEMAS QUE PUEDEN APARECER DURANTE LAS PRIMERAS SESIONES

  • Calambres: realizar los ejercicios con menor fuerza.
  • Espasmos y tics: no preocuparse, indican descarga de tensión en el cuerpo.
  • Tensión interna: no preocuparse ni centrarse en ello, tiende a desaparecer.
  • Sensaciones extrañas: no preocuparse, responden al cambio de nivel de activación del sistema nervioso.

La relajación tiene toda una serie de efectos perceptibles en los que la practican que lo han corroborados por eminentes especialistas. No existe ningún médico, psicólogo o psiquiatra que sea opuesto a la práctica de la relajación. Por favor, sed constante en tu práctica, tu salud física y mental te lo agradecerá.

Pincha en la siguiente imagen para realizar la relajación: