Compartir. Nada se crea, nada se desarrolla, nada se mantiene, nada funciona, sin el concurso, sin el aporte, sin la COOPERACIÓN y sin el trabajo de todos y cada uno de los individuos que participan, se benefician y se integran, en cualquier tipo o nivel de organización, a esta interacción creadora se le llama COMPARTIR.
Sin el compartir, no es posible desarrollar ningún tipo de organización, y este es el origen del individualismo y de la pobreza. Las personas que no saben dar, que no saben recibir, al igual que aquellas que se niegan a dar, o a recibir, son las generadoras del desequilibrio social y económico de cualquier organización.
Existen 4 puntos que originan el sustento total del Universo. Ellos están dentro de otro círculo y ese a su vez dentro de otro y finalmente todos están dentro de un solo círculo. Eso significa que:
- Lo más pequeño, por apartado, lejano o independiente que parezca del universo, está dentro del Todo.
- El Todo, a su vez, está compuesto por la sumatoria de la totalidad de las pequeñas porciones, de las partes.
El Todo es igual a la suma de las partes y cada parte está dentro del Todo mismo. Quiere decir que:
- Por minúscula que sea una parte, su función no se saldrá de la necesidad del Todo.
- Sería absurdo que una parte pequeña pretendiera asumirlo todo.
¿CUÁL ES LA FUNCIÓN Y CUÁL ES LA COOPERACIÓN DE CADA UNA DE LAS PARTES DENTRO DEL TODO?
Basta con que un solo Ser humano, en cualquier lugar del universo, cumpla correctamente lo que le corresponda hacer, para que le cumpla al universo entero, porque lo que no te corresponde hacer a ti, le corresponde hacer a otro.
Dicen los maestros en su sabiduría: “NO PRETENDAS ASUMIR LAS FUNCIONES DE OTRO, PORQUE ES SUFICIENTE CON QUE ASUMAS LAS TUYAS”. Ese es otro de los grandes vicios humanos: pretender hacer las funciones de otros, cuando solamente nos corresponde hacer la nuestra.
Creer que voy a hacer más por asumir funciones de otro, cuando realmente lo que voy es a hacer menos, porque lo que voy a hacer es interferir con la función de otro, dejando de cumplir la mía. Eso no se llamará sabiduría, pero sí puede llamarse bondad.
La COOPERACIÓN está regida por la Ley del Compartir y es un proceso de eslabones. En una cadena, cada eslabón solamente tiene contacto directo con otros dos, con ninguno más, aun cuando la cadena tenga infinitos eslabones. Cada uno de ellos a su vez, solo tiene contacto con dos.
¿Para qué me voy a preocupar del eslabón que está cinco pisos más arriba de mí, cuando yo no tengo un contacto directo con él? Ahí es donde yo me vuelvo ineficiente, ahí es cuando dejo de hacer lo que me corresponde hacer a mí por preocuparme o tratar de hacer lo que le corresponde hacer a otro.
Dentro de la concepción de la cadena de cooperación, los 3 eslabones que hacen el juego de la interacción, hay uno en el centro, otro de arriba y otro de abajo.
El eslabón de abajo representa 2 cosas para cada uno de nosotros:
- Nuestra capacidad de aprender a amar y a respetar.
- Representa nuestro entrenador.
El eslabón de arriba representa:
- Nuestra capacidad de aprender a obedecer, a comprometerme y a aprender.
- Representa aquel que sabe más que yo y al cual le puedo pedir información. Y yo para él puedo ser su entrenador.
Esa triada de eslabones, compone lo que se llama un CONJUNTO DE EVOLUCIÓN, y vamos ascendiendo por esa cadena, de eslabón en eslabón, pero siempre estarán presentes los mismos 3 en diferentes niveles o jerarquías.
No hay para qué sufrir, ni por los eslabones que están más debajo de ti, ni por los que están más arriba de ti.
¿Dentro de ese país, qué eslabón o qué correspondencia tiene cada uno de nosotros? Haz todo eso que haces con todo tu Amor. Pero si tratas de hacer lo que no te corresponde hacer, por hacer eso, dejas de hacer lo que sí necesitas hacer, entonces es cuando te sales del equilibrio del proceso del Universo.
Porque la cultura nos enseñó algo equivocado: hay que ser solidario, necesitas compadecerte y sufrir por la situación de los otros, hay que involucrarse con solucionarle a los demás los problemas; y una cantidad de cosas que nos hacen sentir muy buenos, pero muy ignorantes.
Jamás dejes de cumplir la función que te fue asignada, pero no se te ocurra asumir la función de otro. Mira cuál es tu función y verás lo simple que es. ¿Qué es lo que haces, con quién trabajas y con quién compartes?
Es suficiente para el Universo, con que cada uno de nosotros le ponga todo su entusiasmo, su alegría, su energía, a lo que está haciendo, para que le cumpla al universo entero.
Nuestras preocupaciones inútiles de estar pensando en solucionarle los problemas a los demás, que no son los que a nosotros nos corresponde solucionar, es lo que hace que ni siquiera yo sea eficiente en lo que estoy haciendo.
La INTERFERENCIA solamente es un error y como todo el proceso pedagógico del universo y de los hombres, los errores son necesarios para aprender. ¿Cómo se aprende de un error? -observando el resultado que obtengo de él. Cuando el resultado que obtengo es totalmente insatisfactorio e indeseable, es clarísimo que yo cometí un error. Las interferencias generan todos los resultados indeseables.
¿Por qué crees tú que el planeta Tierra está lleno de personas que?:
- En lugar de Hacer, piden.
- En lugar de Respetar, exigen y agreden.
- En lugar de Compartir, pelean y roban.
- En lugar de tener la Convivencia Pacífica, se matan unos a otros simplemente porque creen tener la razón.
¿Ese es el resultado de qué cosa? -es el resultado de todos nuestros errores de relaciones, de todo proceso pedagógico.
¿Qué estamos aprendiendo? -a dejar de hacer eso. Es necesario hacerlo para reconocer el resultado que se produce del error.
Pero ¿quién necesita asumir el resultado de ese error? -los habitantes del planeta Tierra, no lo van a asumir los Maestros, ni los Hermanos Superiores; y cada uno de nosotros irá dejando de cometer los errores de los cuales va aprendiendo.
NO EXISTEN PROBLEMAS COLECTIVOS. Ese es uno de los errores que cometemos los seres humanos. Pensamos que, como hay errores o problemas colectivos, entonces pensamos que hay soluciones colectivas y la realidad del universo es otra. No hay problemas colectivos y por lo tanto TAMPOCO HAY SOLUCIONES COLECTIVAS.
Los problemas son individuales y las soluciones también. Eso quiere decir que los seres humanos iremos solucionando nuestros problemas uno por uno y no como masa. Y las soluciones las iremos aplicando cada uno de nosotros para nosotros mismos, uno por uno.
COLECTIVIDAD es la sumatoria de individuos con problemas o con virtudes similares. Pero no es que sean colectivos, sino que todos los que tienen el mismo problema se reúnen en el mismo sitio, porque corresponden en ese lugar.
La SOLIDARIDAD como un proceso colectivo, bien poco sirve, porque si tú no eres capaz de solucionar tu propio problema, bien pocas herramientas tienes para pensar que puedes solucionar el de otra persona.
El mejor servicio de Amor que puedes prestar a alguien es darle la INFORMACIÓN para que solucione su problema, cuando él te la pida. Porque ese es un proceso individual.
Si no quieres hacer parte de quienes mantienen la MENDICIDAD, sencillamente comprende que no te corresponde la función de mantenerla. La mendicidad la mantienen los que dan limosna y, por supuesto, cada vez será más abundante. Hacemos 2 errores:
- 1º Mantengo la mendicidad.
- 2º Le he quitado una función que corresponde al Gobierno.
Todavía creemos que la bondad es generar mendicidad. Como eso es necesario dentro de la evolución, la única reflexión de sabiduría es: no hagas parte tú de algo que ya comprendes que es inapropiado. Pero si alguien cree que eso es lo apropiado, déjale que viva su experiencia. Si ya comprendiste esto, no vuelvas jamás a dar limosna, pero si alguien te amenaza, págale, pero eso no se llama limosna.
Mientras no eres Maestro, necesitas cometer errores para poder aprender. Recuerda la definición de Maestro, recuerda que MAESTRO no es aquel que no comete errores, MAESTRO ES AQUEL QUE YA COMETIÓ TODOS LOS ERRORES.
De hecho no es posible pasar a la Maestría sino a través de los errores. Por lo tanto, todo Maestro tuvo necesidad de cometer todos los errores y podemos asegurar que un Maestro cometió más errores que nosotros, a nosotros nos faltan todavía por cometer.
Mientras está en el proceso de formación como Maestro, cometerá los errores necesarios. Pero una vez se llega a un punto, que se llama ILUMINACIÓN, o COMPRENSIÓN de la Sabiduría del Universo, significa que ya no necesita cometer más errores. Por lo tanto, mal haría un Maestro en enseñarles a sus discípulos a cometer los errores que él ya no necesita cometer, pero tampoco los evitará, porque sabrá que son necesarios.
Quiero decir con esto que, en la enseñanza de la filosofía de los Maestros, aquellas cosas que a ti te parezcan extrañas, estés seguro de que no las enseñó el Maestro, sino los discípulos; porque los discípulos creyeron entender al Maestro lo que él no dijo. Eso mismo pasó con Jesús, con Buda, con Krisna, con cualquier Maestro.
Te aseguro que Jesucristo tampoco institucionalizó la limosna, eso lo hicieron los discípulos. Cuando dijo una palabra muy hermosa que pocas personas comprenden, “bienaventurados los pobres de espíritu porque de ellos es el reino de los cielos”, no se refería a los miserables, a los que viven en la miseria, pero eso fue lo que las personas creyeron entender.
Quiso decir que, lo que nosotros llamamos comúnmente el espíritu, es nuestra personalidad (por eso lo llamamos espiritismo o el mundo de los espíritus o personalidades desencarnadas) y que cuando ese espíritu, llamado personalidad, que no es del campo físico, está totalmente enriquecido de ego, de orgullo, de poder que cree que tiene, es imposible que pueda pasar al Reino de los Cielos.
Por eso solo aquel que tiene una personalidad débil, flexible, adaptable y fácilmente trasmutable, será bienaventurado, porque no hay nada más complicado para un ser humano que tener una personalidad fuerte, porque sufrirá mucho y evolucionará poco.
Fíjate lo fácil que es que un discípulo, sin suficiente sabiduría, interprete mal a su Maestro, y eso no solo le pasó a Jesús y ellos saben que es necesario.
Dar limosna es la mejor forma de enseñarle a alguien a no servir para nada, pero eso es necesario para la experiencia de la miseria. Simplemente deja que cada quien cumpla lo que le corresponde cumplir pero tú deja de hacer aquello que no es de sabiduría, pero por favor NO SE LO DIGAS A NADIE.
Nuestro compromiso con los padres está regido por la Ley de Compensación. Cuando nosotros éramos niños necesitábamos ayuda para crecer, cuando nuestros padres sean ancianos y necesiten ayuda para hacer algo, a nosotros los hijos nos corresponde dar esa ayuda.
No permitas que alguien haga por tu padre o tu madre lo que tú necesitas hacer por ellos, porque estarías evadiendo tu responsabilidad, pero tampoco lo hagas tú por el padre de otro que tenga hijos. Y si no tiene hijos, ten en cuenta que para eso es el Estado, a quien todos estamos contribuyendo, el que tendrá que asumir las funciones que se comprometió a asumir.
Una PERSONALIDAD DÉBIL es una personalidad que está dispuesta a ceder, a adaptarse, a ser flexible, a darle gusto al otro, a no discutir y no pelear, a darle la razón al otro aunque no la tenga; todo eso es una personalidad débil, te dicen que te falta personalidad, que te falta carácter.
Y a todo esto se refería el maestro Jesús cuando dijo “bienaventurados los pobres de espíritu porque de ellos será el reino de los cielos”. Podemos decir que es una personalidad flexible o adaptable o tolerante o simplemente, si lo prefieres, una personalidad con sabiduría o femenina.
Aquel que es flexible y cede, tiene más Sabiduría, su personalidad, aparentemente, es más débil que la del otro, porque cuando una persona siempre le dice a los demás “hagámoslo como tú dices”, alguien le va a decir, “a usted le falta carácter” y alguien con sabiduría diría: “AFORTUNADAMENTE YA LO LOGRÉ”.
El que está abajo es el entrenador y representa la mejor oportunidad que tú tienes para aprender a:
- Amar.
- Respetar.
- Ser flexible.
- Adaptase.
Porque AMAR, no es al de arriba, amar al de arriba no tiene ninguna gracia, no tiene ningún mérito. Amar al de abajo, eso sí que tiene mérito, porque el de abajo es precisamente es el que tiene menos información, por lo tanto es el que te agrede, el que no te comprende, el que te confronta, el que te critica, el que te juzga, el que hace todo eso; el de arriba hace todo lo contrario: te respeta, te ama, te valora, te da la información, jamás te juzga ni te condena ni te critica, ¿qué trabajo te cuesta amarlo? -ninguno.
La VOLUNTAD hace referencia a lo de “ser fuerte”. En las referencias de los Maestros también encontramos otros aspectos de la mente con otros nombres. Cuando oyen hablar del “guerrero interior”, aunque no es un término muy adecuado porque cualquier cosa que signifique guerra o lucha irá en contra del principio de Amor, sin embargo es una forma de llamarlo. También se le conoce como ARJUNA o como JOSUÉ, capaz de derribar murallas y de vencer a todos los enemigos, ese tiene que ser muy fuerte. También se le conoce como el “Príncipe Azul”.
Ese principio al que me estoy refiriendo ahora, no se llama el espíritu de la personalidad, sino la Esencia de la Comprensión Inmortal, esa no cede, porque si cediera, entonces permitiría que la ley se violara, porque ella ya es la ley.
Solamente desde el punto de Amor y de Comprensión, recuerda que la ley es absolutamente inflexible y los Maestros que las manejan son absolutamente firmes, pero porque ya están actuando desde el punto de sabiduría; pero qué pasa cuando la ignorancia es muy firme, cuando es muy sólida, cuando es muy fuerte; complicadísimo. Por eso los Maestros no son demasiado claros porque necesitan que nosotros vayamos verificando, descubriendo y pensando en la búsqueda de la verdad.
A MENOS QUE YO TENGA UNA IGNORANCIA BLANDA, DÉBIL Y FLEXIBLE, ME SERÁ DIFÍCIL TRASCENDERLA.
La FIRMEZA es una virtud del Amor, más no la agresión. La agresión es una limitación, o bien del instinto de sobrevivencia o bien del carácter de la personalidad. La firmeza es absolutamente exenta de agresión, pero no permite que los demás violen la ley, sin ser agresiva; es decir, que la firmeza sea aquella de la que hemos estado hablando, aquella que no le da al otro lo que no se ha ganado, porque sería falta de firmeza, pero para eso no necesita agresión.
La firmeza es aquella que no asume el resultado de la decisión de otra persona, porque si yo cedo a asumir el resultado de otra persona, me falta firmeza y lo perjudico. Si yo le doy a alguien algo que no se ha ganado por sí mismo, lo perjudico, y me faltaría firmeza.
Si me falta firmeza, hay algo que me sobra: me sobra agresión y me sobra sentimiento, que es el que me lleva a cometer los errores. Cuando mi sentimiento es muy fuerte, mis creencias son muy fuertes, sustentadas en el falso principio de bondad, son muy fuertes porque mi firmeza es muy débil.
Una persona que no puede ser firme, es porque tiene debilidad de firmeza y fortaleza de ego.
La voluntad, manejada desde la Comprensión, es la que me lleva a destruir mi propio ego, es el trabajo de esos personajes (Josué o el nombre que le queramos dar a ese valor interno llamado el “príncipe azul”), pero no lo vamos a usar jamás como un proceso agresivo hacia los demás porque eso es el ego.
Si haces un compromiso con alguien y él no lo cumple y tú le entregas una compensación por algo que él no cumplió, ¿qué te falta y qué te sobra? -me falta firmeza, me sobra sentimiento (me sobra lástima), me sobra bondad, o sea, ego fuerte.
Difícilmente se puedes evitar el ENFADO en el otro, si le privas de algo que no ha ganado, aunque se puede neutralizar bastante haciéndolo con un tono de voz muy suave, con un proceso reflexivo muy profundo donde se invite a la persona a comprender que yo no le quito ni le doy nada, que cada quien genera lo que tiene o deja de producirlo y que cada quien obtiene el resultado de sí mismo y no el de otra persona.
Trataríamos de explicarles eso a estas personas, pero explicárselo muy amorosamente, muy suavemente, en un tono muy suave, para que no se conecte agresión. Si a pesar de esas explicaciones, las personas insisten en interpretar esto como castigo o como maldad tuya, no es un problema tuyo, solamente es parte del destino.
Por lo general, el eslabón de bajo, siempre va a llamar malo al de arriba. El de arriba comprenderá que el de abajo usa su mejor ignorancia, pero que es lo mejor que sabe hacer y no lo juzgará por eso.
Trata de hacer esto muy amorosamente, con suficiente reflexión para que las personas entiendan algo sencillo: nadie nos da ni nos quita nada a los seres humanos, ni Dios ni los Maestros, soy yo el que me hago correspondiente con tener o no tener y no hay culpabilidad en eso, son solamente el resultado de mí mismo, o de mi ignorancia o de mi sabiduría. Si pienso en culpables, ya me equivoqué.
Permitir que asuma el resultado de sus decisiones, no será jamás venganza, sino sabiduría. Disfrutarme que la otra persona recoja un resultado desagradable, aún por aprender, será venganza. Si yo simplemente comprendo que esto es necesario, y aun sintiendo pesar en mi corazón, no trato de evitarlo, o por lo menos teniendo paz, pero si llego a disfrutar del sufrimiento de alguien frente a su propio error, ahí sí sabré que estoy actuando con total error yo.
Si te da lástima será signo de personalidad más débil, pero si dices “no es que me alegre, pero siento un fresco”, ahí sabrás que es venganza. Es preferible que te pegue la “lástima” y no el “fresco”.
- A MENOR AGRESIÓN, MAYOR FIRMEZA.
- A MAYOR DEBILIDAD DE LA PERSONALIDAD, MAYOR DESARROLLO DE LA COMPRENSIÓN.
- A MENOR RESISTENCIA A LA VIDA, MAYOR FELICIDAD.
Porque así es como se crece espiritualmente. Y de ahí es donde viene la frase del maestro Jesús, “bienaventurada de espíritu”.
Y ahora volvamos al tema de la Cooperación Universal y el asunto del Compartir y hagamos unas preguntas.
- ¿Qué resulta de dar sin recibir?
- ¿Qué resulta de recibir sin dar?
- ¿Qué significa compartir?
- ¿Con quiénes puedes compartir?
Estas preguntas nos ayudan a comprender mejor las cadenas de Cooperación del Universo.
- ¿Tú alguna vez has reflexionado sobre EL RESULTADO DEL DAR SIN RECIBIR?
-Significa la incapacidad de servir, porque tú crees que una fuente de energía, de agua, de alimento, podría subsistir por mucho tiempo si no recibiera nada.
- ¿Qué pasaría si los ríos no recibieran la retroalimentación de las lluvias y de los bosques?, ¿podría volver a haber ríos?
- ¿Qué pasaría si la tierra no recibiera la retroalimentación de los abonos y sus nutrientes?
- ¿Qué pasaría si las entidades financieras no cobraran los dineros que prestan?, ¿podrían volver a prestar?
Desaparece todo tan pronto como se vacíe el “tanque”. ¿Tú crees que eso es sabiduría? Te das cuenta de lo falsa que es esa enseñanza que dice: da todo y no recibas nada.
Hay una necesidad fundamental de la Sabiduría de que nos enseñen todo al revés y es que yo aprenda a enderezarlo. ¿Cómo desarrollo sino la habilidad de enderezar o de comprender la sabiduría y la filosofía si me voy a creer todo lo que me dicen?
En otra entrada del Blog dijimos que los Maestros no enseñan porque no les interesa que sus discípulos aprendan, porque si yo me creo todo lo que me dicen, ¿cuándo voy a hacer Comprensión? Por eso tienen que decirme las cosas al revés para que yo las enderece.
- ¿Qué resulta de RECIBIR SIN DAR?
-Finalmente resultará lo mismo. La persona que recibe pero no da, finalmente dejará de recibir. Es una persona que se va a empobrecer porque el que nada da, nada va a necesitar.
Es como la enseñanza del maestro Jesús cuando ordena que se seque, a una higuera que no daba frutos. Y nosotros nos preguntamos por qué no la ordena que dé frutos, en lugar de que se seque. Lo que esto significa es que aquello que no da nada y que no sirve para nada, bien puede dejar de existir, por eso se puede secar.
Aquello que no da nada, porque solo quiere recibir, no necesita existir, y bien puede desaparecer. ¿Te das cuenta de la necesidad de cooperación, dar y recibir?
- Entonces ¿QUÉ SIGNIFICA COMPARTIR?
-DAR Y RECIBIR. No te niegues a dar ni a recibir.
Dicen los Maestros en su Sabiduría: “DAR AL 100% Y AL RECIBIR TODO LO QUE LA VIDA TIENE PARA TI”. Cuando dicen al 100% se refieren a tus Virtudes Espirituales, al Servicio, al Hacer, a la Felicidad, al Entusiasmo que le pongas a las cosas, a eso se refiere.
En cuanto a las cosas materiales, es la Ley de Compensación, da en armonía y recibe en armonía.
- ¿CON QUIÉNES PUEDES COMPARTIR?
-Con quienes tengas la correspondencia de la Ley de Compensación.
Vamos a leer las frases de los maestros sobre el COMPARTIR.
«EL QUE SABE COMPARTIR, GENERA COOPERACIÓN, UNIÓN, CRECIMIENTO Y MUTUA SATISFACCIÓN».
Las personas que se niegan a recibir tienen alguno de estos 2 problemas:
- O bien tienen una baja autoestima tan grande, que creen no merecer absolutamente nada, creen que hasta las gracias son demasiado para ellos, y por eso responden, “no hay de qué”, o “dele las gracias a Dios, yo no he hecho nada”. La gente que se valora, responderá de otra manera: “con mucho gusto”, “me encantó servirte”, “quiero que sepas que siempre podrás contar conmigo”, porque sabe que lo que ha hecho tiene un valor.
- O tienen un trauma de culpa. Yo tengo que pagar lo que he hecho como daño a los demás y mi forma de pagarlo es dando mucho sin recibir nada. Pero no sabe qué va a dejar de dar muy pronto porque no va a tener qué.
En el compartir de nuestra vida, podemos encontrar tres diferentes tipos de personas homogéneas:
- Las personas con las que casi siempre estoy de acuerdo.
- Las personas con las que pueden hacerse acuerdos.
- Las personas con las que difícilmente nos ponemos de acuerdo.
Al estudiar esto te darás cuenta de que las personas con las que casi siempre estoy de acuerdo, son muy afines conmigo y son con las que realmente puedo establecer un nivel de compartir.
Las personas con las que pueden hacerse acuerdos son las que tienen flexibilidad mental y con ellas también se puede llegar a un excelente nivel de compartir.
Las personas con las que difícilmente podamos ponernos de acuerdo, con estas personas no pueden hacerse relaciones ni con ellas puedes establecer la ley del compartir, porque si no hay acuerdo, entonces habrá agresión. Y si no hay acuerdos, no habrá compromisos en el compartir. Entonces tendré que respetar la experiencia.
- Con las personas con las que casi siempre estoy de acuerdo, puedo integrarme profundamente con ellos en un proceso extraordinario de compartir.
- Con las que puedo hacer acuerdos, puedo llegar a un profundo proceso de compartir porque vamos a compartir la capacidad de ceder, de flexibilizarnos, de adaptarnos y eso será todo lo que nos permita acabar con el ego.
- Las personas con las que no podemos ponernos de acuerdo, son el eslabón de abajo, entonces con esas necesito manejar la aceptación, la acción consciente, pero estas últimas son las más valiosas, porque estas últimas son las que realmente me enseñan a Amar. No me enseñan a amar las de arriba, sino las de abajo.
Por esa razón, muchos Espíritus, hablando de los niveles de Conciencia, que habiendo trascendido a niveles más altos, a civilizaciones más desarrolladas, en un momento dado vieron la necesidad de regresar al planeta tierra para un curso que solamente aquí se dicta: el del eslabón de abajo.
Porque si bien ellos aprendieron a valorarse y a ser felices y a tener éxito en muchas cosas, no aprendieron a Amar al de abajo, porque entendieron mal “Amar a Dios sobre todas las cosas” y ahí se equivocaron, porque Amar a Dios es lo más fácil que hay, es como Amar al Maestro y no es ningún mérito ni ninguna gracia Amar a Dios.
En el sermón de la mañana Jesús dijo: “AMAD A TUS ENEMIGOS”, bendecid a quienes os persiguen y calumnian, llorad por aquellos que os hacen el mal”. Aquí sí dijo el verdadero principio de Amor; este es el eslabón de abajo. Este es el que me enseña a Amar.
Ver con Amor a todos los eslabones de abajo es el ejercicio de Amor que nosotros necesitamos hacer. Por supuesto que si le vas a dar información de sabiduría a un mendigo te pegará con el tarrito en la cabeza; pero puedes mirarlo amorosamente a los ojos, ver en él un hermano que también está aprendiendo y, amorosamente le puedes decir que, de momento no tienes algo disponible para él, pero que en la vida siempre habrá alguien que le pueda ayudar. O sencillamente le dices: -hermano, de momento no tengo nada para ti, porque en realidad no tengo nada para él, porque lo que yo le pueda dar a él no le sirve.
Desde mi interior, sin decir nada, le puedo envolver en luz rosada, que es luz de Amor y puedo pensar que ojalá él habrá su mente a recibir lo que la vida le pueda enseñar para que pueda mejorar de donde está. Sería lo correcto, pero míralo como un hermano que está aprendiendo, no como tu enemigo porque no lo es.
Cuando te amenacen, entonces pagas tu peaje y sigues tranquilo. No los puedes ver como enemigos sino personas que no te comprenden.
Y por supuesto ellos representan tu oportunidad de aprender a Amar y son tus Entrenadores para tu desarrollo Espiritual. Puedes dar las gracias por eso.
Para terminar me gustaría que nos quedada clara la pregunta: ¿CUÁL ES EL VERDADERO SENTIDO DEL COMPARTIR?
Dar y recibir equilibradamente. Cuando no comprendemos esto es cuando cometemos los errores de dar sin recibir o pretender recibir sin dar y generamos grandes desequilibrios.
Se refiere a ambas partes, pero hay una gran diferencia entre la parte material y la parte espiritual. Y es que la parte espiritual tiene un flujo constante descendente, es decir, que la mayor información va a fluir hacia la menor información pero al revés no puede hacerse, porque lo que tiene menor información no tiene nada que ofrecerle a lo que tiene mayor información. Pero baja por escalones, que son las jerarquías del universo.
Yo voy a recibir información de alguien que está por encima de mí. A su vez, a mí me corresponde dar información al que está por debajo de mí porque yo sé más que él. Yo recibo de un punto y doy a otro punto, no al mismo. Cuando confundimos ese principio, con e
l principio del compartir dentro de las estructuras de la materia, de la energía, no de la información, es cuando cometemos el error que la cultura nos ha enseñado: tú le das aspectos materiales a esta persona y los recibes de aquel otro; ahí me salí de la ley.
A nivel de energía, necesito recibir de los mismos a quienes les doy, porque si no, ¿qué va a retroalimentar la fuente que la genera? Es tan simple como esto. Pongamos un ejemplo con una entidad financiera. ¿A ti te parecería lógico que una entidad financiera les preste dinero a unos clientes y le cobre a otros que no son sus clientes? La entidad quiebra, los clientes que han recibido los préstamos dejarían de asumir su responsabilidad y la fuente que generó el préstamo desaparecería.
Lo que funciona y lo lógico es que, aquel que recibió es aquel que le corresponde devolver y no a otro. Esta la llamamos la Ley del Compartir y la otra ley, la de la información, están regidas por el servicio, que se llama la ley de Compensación. Interactúan estas leyes.
Todo lo que tiene que ver CON ENERGÍA O CON MATERIA, necesita DAR Y RECIBIR EQUILIBRADAMENTE DE LOS MISMOS que interactúa esa relación; mientras que lo que tiene que ver con INFORMACIÓN, fluye de otra manera, DEL MÁS AL MENOS, porque del menos al más no puede fluir. Y así no nos salimos de la ley del Universo.