Meditación en Movimiento. En algunas escuelas espirituales se practican las meditaciones de pie y caminando, además de las posturas sentado y tumbado. Cada postura responde a un propósito, un momento concreto y un lugar; cada cual se combina para ayudarnos a conservar y regular nuestros estados internos.

La práctica de la meditación a primera hora de la mañana es un modo ideal de empezar el día, y si no sostienes la energía y la concentración a lo largo de la jornada, los programas inconscientes que llevan años funcionando toman de nuevo las riendas.

En este caso, todo el trabajo que acabas de llevar a cabo para crear un estado interior elevado se disuelve en la lista interminable de las tareas de nuestro día a día. Por lo que ya no estás en estado creativo, porque acabas de caer en los programas de siempre y en las emociones de supervivencia del pasado.

Para llevar la energía contigo durante la jornada se utiliza la meditación que incluye levantarse y caminar. Cuando domines la técnica de elevar tus vibraciones, tu energía y combinas ese gesto con una intención clara, contarás con una práctica que te permitirá mantener la energía y con el tiempo, poder integrarla en tu estado natural.

La mayor parte de nuestro día actuamos desde el inconsciente, con nuestro piloto automático puesto, sin saber lo que estamos haciendo. Estas conductas inconscientes aparecen porque el cuerpo reemplaza a la mente. Cuando el cuerpo sustituye a la mente, dejamos  de vivir en el momento presente, por lo tanto, ya no nos encontramos en un estado creativo, y nos alejamos de nuestros propósitos y sueños.

Podemos trabajar para emitir una nueva impronta electromagnética que esté en sintonía con nuestro futuro. Cuando tu energía y el futuro en potencia que ya existe en el campo cuántico vibran en sintonía, el mañana viene a tu encuentro. Nos transformamos en un imán de un nuevo destino que se manifestará en forma de experiencias inesperadas.

Todas las posibilidades existen en el eterno ahora y cuando superas tu identidad como cuerpo conectado con personas, lugares y momentos devienes pura consciencia. En ese momento trasciendes la materia y entras en el campo cuántico de la información y la energía.

La meditación de pie y caminando es para ayudarte:

  • A ser más consciente del momento presente.
  • A sostener y conservar estados elevados durante el día.
  • A mantener la conexión con el nuevo futuro cuando tienes los ojos abiertos.
  • Y llevarla contigo en el camino a ese nuevo futuro.

DESCRIPCIÓN DE LA MEDITACIÓN EN MOVIMIENTO.

La meditación en movimiento la practicamos en un lugar tranquilo en la naturaleza donde no abunden las distracciones. Al comienzo, cuanta menos gente y actividad haya, menos te costará permanecer centrado y con la práctica podemos realizarla en ambientes más concurridos.

Esta meditación comienza por quedarte muy quieto, con los ojos cerrados, luego llevas tu atención al corazón al mismo tiempo que vas ralentizando tu respiración e intenta respirar a través de tu corazón.

Cuando hayas logrado un estado adecuado, comienza a cultivar las emociones elevadas que te conectan con tu nuevo futuro. Al estar inmerso en estas emociones irradia la energía más allá del cuerpo, hasta notarla dentro de ti y a tu alrededor. A continuación, une a esa energía emocional tus intenciones de los deseos que tienes para el nuevo futuro.

Aún con los ojos cerrados traslada la atención al mundo exterior al mismo tiempo que te desplazas de un estado beta de tus ondas cerebrales a uno alfa. Al hacer esto acallas los pensamientos, las voces internas y te llevará a un estado de trance que te hará más sugestionable. Cuanto más permaneces en estado de trance, menos resistencia encontrará la nueva información a la hora de acceder a tu subconsciente.

Al entrar en un estado emocional elevado en sintonía con tu nuevo futuro, serás más propenso a creer y aceptar los pensamientos intencionales acordes con esas emociones. Por lo tanto, los pensamientos y las imágenes que tu mente vaya creando podrán sortear la mente analítica y serás capaz de programar el sistema nervioso autónomo para crear la biología del futuro que deseas.

Con esta energía de tu nuevo futuro, te será muy fácil abrirlos y comenzar a andar. No prestes atención a nadie, a los objetos ni a nada de lo que te rodea. Abre tu foco y deja la mirada perdida en el horizonte, y mantente en un estado de trance. Tu mente seguirá conectada a las imágenes del nuevo mañana y estás preparado para internarte en el futuro como una persona distinta.

Ha llegado el momento de transformar tu postura y tus movimientos. Puedes imaginar que se siente cuando eres una persona valiente, o desplazarte con la energía elevada de un cuerpo sano, o andar como una persona tolerante y amorosa. Con la práctica de tu nuevo andar, vas a adquirir la costumbre de caminar como una persona rica, de pensar como una persona sana.

Una vez que empieces a sentir e integrar esas emociones elevadas de manera natural, éstas se adueñaran de ti y te convertirás en la persona que quieres ser. Cuanto más encarnes las emociones elevadas, más se comportará tu cuerpo y tu cerebro como si esa experiencia ya se hubiera manifestado, lo que implica que, estás recordando tu nuevo futuro.

Y como la energía acude allí donde pones la atención, es conveniente que evocaras escenas de tu película mental mientras visualizas, encarnas y sientes el futuro. Según lo hagas, las escenas de la película se convertirán en mapas energéticos y biológicos del porvenir. El gesto de experimentar emociones futuras y combinar esas emociones con la intención ejerce un doble efecto:

  • Instalas nuevos circuitos que graban en tu cerebro un mapa intencional de tu nuevo mañana.
  • Y generas la química emocional de ese suceso futuro, lo que estimula a nuevos genes de maneras distintas, induciendo así a tu cuerpo a prepararse para su flamante futuro.

Esta meditación también consiste en crear recuerdos de experiencias que aún no han sucedido, se trata de recordar el nuevo futuro. Cuando abres los ojos y echas a andar y te concentras en el corazón, cuanto más intensas sean las emociones, más atención prestarás a las imágenes y los pensamientos que evocan tus sentimientos.

Esta vivencia enriquece el cerebro y crea recuerdos. Tu cerebro ya no vive en el pasado, sino en el futuro. Cuanto más vivas las emociones elevadas, más se comportarán tu cerebro y tu cuerpo como si esa experiencia ya se hubiera manifestado, lo que implica que, en un sentido muy real, estás recordando el futuro.

Recuerda que esta meditación no se centra tanto en los resultados que esperas conseguir como en la persona que quieres ser. Cuanto más te acercas a esa persona, más se ajustará la realidad al nuevo estado de tus ser. El proceso de transformarte conscientemente en otro es lo que te ayuda a seguir alineado con un destino distinto.

Al practicar este ejercicio las veces suficiente, no sólo llevarás contigo esa energía a lo largo del día, sino que será parte de ti. Con el tiempo, te sorprenderás a ti mismo caminando de manera natural como una persona feliz o sintiéndote como un emprendedor valioso y rico.

INSTRUCCIONES PARA SU CORRECTA PRÁCTICA.

  • Comienza por encontrar un espacio tranquilo en la naturaleza. Si vives en la ciudad, haz la meditación en un parque tranquilo o un lugar de soledad.
  • Empieza por desconéctate de tu entorno externo y fíjate en el momento presente cerrando los ojos.
  • Ya sabes que esta meditación tiene partes de pie parados y partes caminando como tu yo futuro, recordando tu futuro.
  • Te recomiendo que uses auriculares que estén conectados a un dispositivo móvil, como tu móvil o un iPod. Esto es mucho mejor para meterte en la meditación y evitas distraerte.
  • Y recuerda que esta meditación es excelente para estar en el presente y encarnar tu nuevo futuro.